viernes, 15 de septiembre de 2023

Tu idioma es de paletos.

 -Pero, vamos a ver tío ¿Qué necesidad tienes de hablar así, en un idioma que sólo entendéis cuatro gatos?

-Ya, pero es que esos cuatro gatos vivimos en la misma tierra. Además, es la primera lengua que oímos en casa, a nuestra madre, a nuestros abuelos, a los vecinos…   Es que os pensáis que lo hablamos para tocaros las narices.

-Sí, la verdad y porque sois un poco paletos. Si sales de ahí, no te va a valer para nada. ¿Te van a entender en Madrid, o en Londres…en París? No, ¿verdad?

-No, claro que no, y a un señor que venga de Brasil seguramente tampoco, pero para eso está lo de estudiar idiomas: yo hablo otras lenguas y cuando me sea preciso, las usaré.

-Joder, tío, pero es que es ridículo. A ver, ¿en cuantos países es oficial tu idioma?

-En uno.

-Lo dicho: ridículo. El español lo hablan seiscientos millones de personas y es oficial en docenas de países. O el inglés, mil y pico de millones y oficial también en medio mundo empezando por Estados Unidos.

-No me líes que Estados Unidos NO tiene idioma oficial. Lo consideran  discriminatorio. Cada estado regula ese tema y sólo la mitad lo ha hecho. Por otra parte, en Hawaï el inglés y el hawaiano son cooficiales, o en Dakota, que lo son el inglés y la lengua nativa de los Sioux.  Y además ¿qué más da cuantos habitantes hablen un idioma?  ¿Eso lo hace menos respetable?

-No, eso lo hace un idioma de juguete, o un dialecto, que es lo que es. Y no te salgas del argumento  ¿Cuántos sois?  ¡Si ni en vuestra propia tierra lo habla todo el mundo! Hay zonas enteras en que no lo habla nadie.

-Pues unos cuantos más de los que te imaginas. Varios millones. Y lo de esas zonas tiene su explicación en los movimientos migratorios, es lógico y habitual.

-Anda, vete a la mierda. Millones, dice.

-Pues sí, millones.  Es que os pensáis que sois el centro del universo, pero en Europa se hablan 84 lenguas. Y de esas, 24 son oficiales.

-Y el resto, de paletos, jajaja.  Anda, tío, no tengo ganas de discutir más, pero ya te digo que procures tener un buen nivel de esos otros idiomas, porque cuando salgas de ahí NO te va a entender ni Dios. Tu “lengua” no vale para nada fuera. Para nada.

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Bien, a todos os/nos puede parecer que esta conversación  habla del catalán, ¿verdad?  Claro, es que está llena de argumentos “cuñados” a tope: “si es que sois cuatro gatos” “fuera de Catalunya no os entiende nadie” “sólo es oficial en un país pequeño”

Pues no. Este diálogo podría referirse a varios países:

Bielorrusia (Belarús) con 9 millones de hablantes de bielorruso, oficial en un solo país.

Bulgaria, 10 millones de hablantes del Búlgaro, también oficial solo en un país.

Danés, solo 5 millones de personas hablan ese idioma. Dinamarca es el único país donde es oficial.

Eslovaco, con otros 5 millones de personas…

Esloveno, menos aún, oficial sólo en Eslovenia y con 2,2 millones de hablantes.

Finés, 5 millones de personas. Oficial sólo en Finlandia aunque se hable en zonas de Suecia y Noruega.

Gaélico irlandés. Oficial sólo en Irlanda y con apenas 350000 personas que lo utilizan.

El Letón y el Lituano, oficiales sólo en su país y con 2,5 millones y 4 millones de hablantes respectivamente.

Noruego, 5 millones de personas lo hablan en Noruega.

Y así podría seguir durante un buen rato y eso que SOLO he hablado de idiomas oficiales de países, he omitido aposta todos los cooficiales que son legión.

¿A que viene todo este rollo? Pues que me encantaría que ahora cualquiera de vosotros volviese a leer la conversación, pero en vez de pensar que se trata de un español y un catalán, vamos a leerla sabiendo que el primer personaje se llama August Larsson y es un señor sueco y el segundo se llama Erkki Lönghrot y es un señor finlandés.  O que el primero es un señor ruso y el segundo, un bielorruso intentando que el pez grande no se coma al pequeño.

En cualquiera de los casos, se da la circunstancia de que a todos ellos se les puede aplicar el argumento más cuñadísimo de todos, ese de “fuera de ahí tu idioma no sirve para nada”. No, el danés no sirve para nada, ni el finés, ni el bielorruso, ni el eslovaco, ni el corso, ni el catalán, ni el bretón, el gallego, el siciliano, el euskera, el sorabo, el sardo, el sami, el romaní, ni ninguna de las otras sesenta lenguas minoritarias y/o minorizadas sirve para absolutamente nada que no sea comunicarse con la gente de su entorno, con sus amigos, con su familia. Para vivir y aprender su cultura, sus costumbres, sus tradiciones, para leer, para escribir, para soñar, para crear…lo dicho, para nada.

Paloma G.